A veces pasamos toda nuestra vida, buscando o preguntándole a Dios que desea que hagamos o seamos. Cuando tenía 11 años me dijo que me quería de misionera. Le creí, esperé, oré y en el camino me cambió.
Este libro relata parte de eso y cómo tú puedes ser parte de la extensión de Su Nombre en todo rincón de la Tierra.
0 Comentarios