Ser transparentes

Rosanna-Ramírez---Ser-transparentes

 
Cuando algo dice ser “transparente” es porque lo que hay dentro puede ser visto sin estorbo desde afuera o desde su mismo interior, quedando todo al descubierto.

Realmente al escuchar cada uno de los temas en la conferencia de Mujer Verdadera´15, y ver cómo cada conferencista abría su corazón y nos hablaba de sus caídas y luchas contra el pecado, mi corazón también era abierto con ellas, se volvía transparente ante Su verdad, quedando todo al descubierto y sin nada que esconder.

Solo la exposición ante Su Palabra, Su gracia para conmigo y mi obra intencional de que Él hable a mi vida, producirán una genuinidad para con Cristo y hacia los demás. Teniendo simplemente que decir: “Sí, Señor Tú tienes la razón, esto es lo que verdaderamente hay en mi corazón”.

Así, esta transparencia será vista en las siguientes áreas de mi vida:

1. Mi prioridad será que el nombre de Cristo sea famoso, no mi propia gloria sino la de Él. Él debe ser encontrado en mí. (Salmo 115:1; Romanos 11:36)

2. Me hará humilde, reconoceré mi condición y mi necesidad de Cristo y he de tratar a mi prójimo tal y como lo haría con Jesús, superior a mí misma. (Salmo 138:6)

3. Seré auténtica. El Señor aborrece a los que fingen Su amor hacia Él, y por consiguiente fingirían su amor hacia los demás; serían hipócritas. (Mateo 6)

4. Complaceré a Cristo. Todas las cosas que realice serán hechas como para Cristo, para agradarle y no para ser vista por los demás. (Colosenses 3:23)

5. No justificaré mi pecado. No he de buscar excusas para pecar, y si recibo la corrección de alguien mi corazón no guardará rencor, sino que me evaluaré con la vida de Jesucristo. (Salmo 51:3-4; Mateo 7:5)

6. Hablaré verdad. No mentiré, es decir, no alterare la verdad, incluyendo la exageración en la cual incurrimos muchas veces al describir algo, pensando que no es tan relevante y lo hacemos tan natural que ni siquiera nos damos cuenta. (Efesios 4:25)

En la misma medida en que experimentemos la magnitud del amor de Cristo, a la vez, éste será reflejado de manera pura hacia los demás. El Señor está dispuesto a hablarnos cada día y a usarnos para Su gloria, pero necesitamos pasar tiempo de calidad con Él, necesitamos presentar nuestros cuerpos en sacrificio vivo; estar dispuestas a sacrificarnos por el bien del Reino. Porque Él no esconde Su rostro de quienes Lo buscan de veras.

La confrontación de Su Palabra vuelve mi corazón transparente, realmente esto me atemoriza, pero solo así se vivificará mi alma.

Es un motivo de alabanza y rendición ante Su majestad el hecho de que el Señor se digne en seguir hablándonos, y buscarnos tan celosamente para santificarnos en Él.

Fuente: https://www.avivanuestroscorazones.com/blogs/mujer-verdadera/sed-transparentes/


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