No hay nada malo en estar soltero

Estar soltero es una etapa increíble en la vida. Aunque muchos cristianos (con buenas intenciones) enfatizan la importancia de estar casado, esto es lo que indirectamente causa sentimientos de insuficiencia en los solteros. Pero la realidad es que estar soltero no nos hace «menos que» o que estan «incompletos» en comparación con aquellos que sí están en una relación. Si bien la Biblia señala que no es bueno que la humanidad esté sola, esto no coloca una relación singular y a largo plazo por encima de las relaciones que muchos solteros, puedan disfrutan de la vida.

No me casé hasta los 30 años, así que entiendo muy bien la soltería. Además, trabajé en una iglesia grande durante 13 años donde regularmente me preguntaban cuándo me iba a casar. ¿Te identificas? Mi respuesta siempre fue: «No lo sé».

Cuando asistía u oficiaba bodas, solía quedarme para la recepción. Recuerdo llegar al punto en mi soltería donde terminaba saliendo justo cuando iban a lanzar el ramo/ o la liga. Para mí era otro recordatorio de que estaba soltero, casi como si no estuviera completo hasta que me casara.

Cuando me sentía inseguro por mi «estado civil» al conocer gente nueva en un entorno profesional, ocultaba mi dedo anular, dejándoles adivinar si estaba casado o no. Supongo que después de tantos años de énfasis en el matrimonio, sentía que necesitaba ocultar mi soltería a veces.

El matrimonio es importante.

Este no es un artículo en contra de la institución del matrimonio. El matrimonio es bueno, ¡incluso grandioso!

La Biblia está llena de imágenes de matrimonio. El pacto entre Dios y el pueblo en Éxodo 19-24 está lleno de imágenes de matrimonio. Cuando el pueblo peca al hacer un ídolo a imagen del becerro de oro en Éxodo 32, la reprensión de Moisés se trata de su «infidelidad matrimonial» con Dios. La relación entre Cristo y la Iglesia se habla en términos de una novia y un novio.

El matrimonio es algo bueno y saludable. Pero la pregunta es: ¿Es el matrimonio la única opción? ¿No es la soltería igualmente una expresión de plenitud?

La soltería es celebrada en la Biblia.

La soltería no es simplemente un precursor desafortunado de estar en una relación. La soltería es realmente celebrada en la Biblia. Recuerda las palabras del Apóstol Pablo a la iglesia en Corinto en 1 Corintios 7.

Ahora, en cuanto a las preguntas que me hicieron en su carta: es cierto que es bueno abstenerse de tener relaciones sexuales. Sin embargo, dado que hay tanta inmoralidad sexual, cada hombre debería tener su propia esposa, y cada mujer su propio marido.
El esposo debe satisfacer las necesidades sexuales de su esposa, y la esposa debe satisfacer las necesidades sexuales de su marido. La esposa le da la autoridad sobre su cuerpo a su marido, y el esposo le da la autoridad sobre su cuerpo a su esposa.
No se priven el uno al otro de tener relaciones sexuales, a menos que los dos estén de acuerdo en abstenerse de la intimidad sexual por un tiempo limitado para entregarse más de lleno a la oración. Después deberán volverse a juntar, a fin de que Satanás no pueda tentarlos por la falta de control propio. Eso les digo a modo de concesión, no como un mandato. Sin embargo, quisiera que todos fueran solteros, igual que yo; pero cada uno tiene su don específico de Dios, unos de una clase y otros de otra.
Así que les digo a los solteros y a las viudas: es mejor quedarse sin casar, tal como yo; pero si no pueden controlarse, entonces deberían casarse. Es mejor casarse que arder de pasión.
(1 Corintios 7:1-9).

Para aquellos que están solteros, no están incompletos. De hecho, el apóstol Pablo, el primer teólogo del Nuevo Testamento, dijo que preferiría que todos fueran solteros para poder dedicarse más plenamente a la expansión del Reino de Dios.

Muchas personas contrarrestarán este pensamiento con Génesis 2:18, «Entonces el Señor Dios dijo: ‘No es bueno que el hombre esté solo; le haré una ayuda adecuada’». Lo que se presenta aquí no es un mandato para el matrimonio, sino un reconocimiento de la necesidad inherente y el deseo de estar conectados «para no estar solos«. Esto no implica necesariamente el matrimonio, pero sí eleva la necesidad de comunidad en nuestras vidas.

Dios nos creó para la relación, con Él y con los demás. La Escritura no exige el matrimonio, y si no estás casado, no estás incompleto.

Disfruta esta fase de tu vida soltero.

Cuando miro hacia atrás en mi época de soltería, tengo buenos recuerdos. Podía ir a cualquier lugar en cualquier momento. Podía pasar el rato con cualquier amigo en cualquier momento. ¡Fue genial!

Por otro lado, anhelaba estar casado, estar en una relación profunda. Recuerdo salir con citas y no encontrar una cónyuge. Y después de tantas citas, empecé a preguntarme si había algo mal en mí. Pensaba, «¿Cuándo me voy a casar?» Era la misma pregunta que me hacían regularmente, a mí mismo.

Experimenté autocompasión, libertad e incluso me auto descubria. Mirando hacia atrás en mi etapa de soltería, aprendí y crecí como persona. Pude construir amistades para toda la vida, ser invitado a las familias de mis amigos y descubrir quién era. Aunque tuve momentos de soledad y torpeza, fue una etapa increíble en la vida.

Fue durante mi fase de soltería cuando conocí a mi hermosa esposa.
Fue durante mi fase de soltería cuando fui ordenado en el ministerio cristiano.
Fue durante mi fase de soltería cuando oficié mi primera boda.

Si estás soltero, disfruta esta etapa de la vida. A veces nos obsesionamos tanto con desear estar casados que perdemos el enfoque en el aquí y ahora. Toma la vida un día a la vez y disfruta la etapa en la que estás, porque no hay nada como la etapa de soltería.

No hay nada como la etapa del matrimonio. No hay nada como la etapa de ser padre. El problema surge cuando comenzamos a pensar, «Si solo fuera (rellenado el espacio en blanco), entonces estaré completo». Pero no lo estarás.

Necesitamos buscar la plenitud en nuestras situaciones actuales, justo donde estamos hoy. Solo entonces podremos tener la esperanza de encontrar la plenitud en otras etapas. No podemos esperar que otra etapa nos brinde una curación o plenitud elusiva.

Entonces, ya sea que sientas que la Iglesia enfatiza demasiado el matrimonio o no, tómate un tiempo para encontrar la plenitud y conectarte en el aquí y ahora. Si tus amigos parecen tener lástima de ti por estar soltero y eso debe irritarte, pregúntate por qué. Tal vez haya más debajo de la superficie.

Si tienes una buena relación con tu pastor, pídele que hable sobre las alegrías de cada fase importante de la vida. Alentar a los solteros en la Iglesia solo les dará más poder para tener una influencia positiva.

Conclusión

No dejes que otros te hagan sentir inadecuado o inseguro; vive esta vida, esta etapa de la vida en la que Dios está dispuesto a usarte ahora para cosas increíbles. Permítete crecer y ser estirado como nunca antes.

Haz un compromiso, aquí y ahora, de que no dejarás que una actitud auto-derrotista te haga decir: «Cuando esto suceda, seré feliz» no permitas que esa frase se apodere de tu vida. En cambio, resuelve vivir la vida al máximo ahora. Usa el tiempo, la energía y la libertad que tienes ahora para encontrar satisfacción emocional y espiritual, sirviendo en el Reino de Dios y conociéndole cada día más.

Te prometo que cuanto más sano te vuelvas ahora en esta etapa en la que estás, más sano y más satisfecho estarás en general. Ya sea que la próxima etapa sea una nueva carrera, matrimonio, hijos o reubicación, vivir en Marte. Es ventajoso trabajar en nosotros mismos ahora.

No hay nada como esta etapa, así que abrázala y vívela al máximo.

 
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